Una voz autorizada del fútbol boliviano se unió al coro de felicitaciones por la histórica clasificación de la selección Sub-17 al Mundial de Qatar 2025. Marco Antonio Etcheverry, el legendario “Diablo” y uno de los máximos referentes de la Verde, envió un emotivo mensaje a los jóvenes futbolistas que lograron este hito después de 39 años de ausencia de Bolivia en esta categoría de la Copa del Mundo.

A través de un video que rápidamente se viralizó en las redes sociales, el exjugador cruceño expresó su profunda alegría por el logro de los jóvenes talentos. “Qué gusto saludarlos a todo el país. Creo que sienten esa ilusión que están dando los niños de la Sub-17, los jóvenes que están marcando un futuro importante de ahora en adelante”, manifestó Etcheverry, contagiando su entusiasmo por el promisorio futuro del fútbol boliviano.

El “Diablo”, consciente del significado de representar a Bolivia en un Mundial juvenil tras su propia experiencia en Canadá 1987 con la Sub-16 de la Academia Tahuichi, no escatimó en elogios para los jóvenes futbolistas. “Entraron a la historia del fútbol boliviano, de la Conmebol, de sus seres queridos, de la familia y de todo el país”, añadió, resaltando la trascendencia de su hazaña para la nación.

Con la autoridad que le otorga su trayectoria, que incluye la histórica clasificación al Mundial de Estados Unidos 1994 con la selección absoluta, Etcheverry envió un mensaje lleno de cariño y reconocimiento a los jóvenes mundialistas. “Les mando todo el cariño. Después de 39 años ustedes marcan este nuevo sueño de todos los bolivianos que llegaron a un Mundial. Muchísimas felicidades, muchachos, y a todo el país: a disfrutarlo”, cerró el ídolo eterno de la Verde, sumándose al júbilo nacional.

El emotivo reconocimiento de Marco Antonio Etcheverry se une al sentimiento generalizado de orgullo que embarga a Bolivia tras la épica clasificación de la Sub-17. La selección juvenil consiguió el último cupo sudamericano al vencer por la mínima diferencia a Ecuador en el repechaje disputado en Colombia, marcando un hito que ilusiona a toda una nación con el futuro del fútbol boliviano.